
¿Sabías que en España hay más de 4.000 menores extranjeros no acompañados (MENAS)? 4.000 chavales que carecen de la compañía de un adulto que les guíe y les proteja de todo lo que les amenaza a su llegada a nuestro país, como las mafias o vivir en la calle. Abandonan a sus familias en su país de origen con la esperanza de encontrar un futuro mejor y lo apuestan todo por una opción que, desgraciadamente, no es como se la habían vendido. Y es que, para colmo, a estos menores no les interesa decir su edad porque pasarían a unos espacios de acogida de doble filo: tendrían un lugar donde cobijarse pero con unas condiciones terribles. Además, si alcanzan la mayoría de edad en estos centros, automáticamente serían expulsados de vuelta a su país.
Hay casos que ponen los pelos de punta, como el de un chico que acogió Murialdo, que llegó a Madrid con 17 años y viajando en un maletero, y, tras sufrir explotación y deambular por distintas ciudades de España, acabó confesando su edad real. Se le ayudó a regularizar su situación y se le prestó acompañamiento, se formó en climatización y hoy tiene un trabajo fijo, papeles en regla y situación estabilizada. ¡Es increíble lo muchísimo que consiguen estos chavales si se les presta la ayuda que necesitan!
Esto y mucho más nos lo cuentan en la revista Vida Nueva, donde destacan la labor de Murialdo con los MENAS. Os vais a quedar con la boca abierta con las historias de nuestros chavales, así como fotos de otros muchos menores que intentan llegar a España como sea, metidos en el salpicadero o el motor de un coche, o dentro de una maleta… Podéis leer el artículo completo aquí.
Imagen: Guardia Civil – Ministerio del Interior